Escocia (Drumnadrochit - Loch Ness)

Un 31 de julio, trabajando en un restaurante de Edimburgo, conocida mundialmente entre otras cosas, como la ciudad que alberga el festival de teatro y arte escénica (Fringe) más grande del mundo durante prácticamente todo el mes de agosto, podría ser un día de tirarme de los pelos ante la que se me venía encima, por eso, decidí desconectar durante dos días, y viajar a las Highlands, concretamente busqué pueblos en google maps en el Loch Ness, y me llamó la atención el nombre de: Drumnadrochit

La primera anécdota ocurrió en el mismo autobús, cuando una mujer mayor que había a mi lado, me preguntó que a donde iba y de donde era, tras lo que al final incluso me ofreció un caramelo que estaba bastante bueno, con lo cual ya pude ver desde el primer minuto la amabilidad y forma de ser de la gente de las Highlands.

Drumnadrochit, es una localidad formada por varios municipios adyacentes, cuyo monumento más importante y visitado es el famoso Urquhart Castle, a la orilla del Loch Ness. Está en ruinas y para acceder al interior hay que pagar entrada, no sé si eran 9 o 10 Libras, que no pagué. Desde la carretera ya podía observarse el castillo, que como digo sólo son ruinas. Tambien hay cruceros por el lago en busca de Nessie, existir no se si existirá pero lo que tengo claro es que me pareció verlo esa misma noche, y no en el lago concretamente...

 

Tras regresar al pueblo por la senda con la que se alcanza el castillo, parelela a la carretera durante unos 2 o 3 kms., decido avituallarme, pues ya era hora, tras una pinta bien fresquita en el bar de la carretera, para a posteriori sentarme en un merendero para comer la comida que había traido preparada, siempre hay que viajar bien preparados, tras la cual decido regresar al hostel, para relajarme una hora y media en el sofá leyendo los panfletos que ahí había con información de la zona.

Una vez desperezado, decido callejear en busca de unas cascadas que había a unos kilómetros de la localidad. Haciendo caso a mi intuición y sobretodo a seguir a tres turistas, vemos que ese camino sólo llevaba a un prado con vacas. Las tres turistas deciden hacer lo que yo debía haber hecho, preguntar a un hombre local, respondiendo que había que tomar el otro camino y más adelante veríamos el desvio indicado en un cartel. Y así fué. Las cascadas no eran gran cosa, pero la verdad que era un lugar para desconectar de todo, nadie que molestara, y sólo se oía el ruido del agua y la naturaleza. Pero no podía estar ahí mucho rato, con que decidí regresar al pueblo, no sin antes tomar fotos a semejante paisaje.

Ya en el pueblo, decido entrar al museo sobre el Loch Ness, no era gratis, pero bueno, todo lo que sea aprender y sobretodo hacer "listening", no está de más. Ahí te explican como se formó el lago y las diversas teorías y busquedas sobre el posible monstruo desde todos los puntos de vista.

Ya bien entrada la tarde, casi la noche, decido callejear de nuevo, en busca de un posible pub libre de turistas, sólo de gente de la zona, y lo encuentro, vaya que si lo encuentro, un poco más y lo que no encuentro es la salida. Es sentarte relajado a disfrutar de una pinta en una mesa y nadie dice nada, pero en cuanto vi un sitio libre en la barra, ahí que fuí ni diez minutos tardó un paisano en entablar conversación, aún costando entendernos al principio, al cabo de unas rondas de cerveza más tarde nos entendíamos bastante bien, da gusto conocer gente tan acogedora, es la principal ventaja de viajar solo, intentando adaptarse en el medio visitado. Al volver al hostel, es cuando creo que ví a Nessie, pero tocaba ir a dormir, así que eso hicimos.

Ya la siguiente mañana, tocaba volver a Edinburgh, no sin pena, pero sobretodo con la sensación de que había valido la pena todo lo visto y vivido el día anterior, y con la promesa de volver, aunque sea de paso, magnífica gente.

Cómo llegar: Tren desde Edinburgh hasta Inverness (4 horas), y desde Inverness autobús hasta Drumnadrochit (25 minutos).
Dónde dormir: Loch Ness Backpackers, Drumnadrochit. Hostel para mochileros que no quieran o no puedan permitirse grandes lujos. Acogedor y con todo lo necesario. En el mismo pueblo hay una tienda donde comprar suministros.